“La multitud de la carretería, carreteros y bueyes, era también de consideración, por la puntualidad con que acudían á sus horas concertadas, proveyendo á las grúas de todo cuanto necesitaban; se veían cada día traer piezas grandes, basas, cornisas, capiteles, pedestales, dinteles, jambas y otras piezas de tan descomunal grandeza, que no las meneaban menos que siete ó nueve pares de bueyes, y algunas doce, muchas veinte, y no pocas cuarenta; aquí era de ver mucha una procesión, ó un rosario tan largo de estos bueyes, ensartados tan iguales y tan parejos, y tirar todos tan á punto de aquella pesada carga, que parecía entenderse para arrancar con ella, y cuando esto no era muy á una, acontecía arrancar del casco los cuernos de los que quedaban faltos ó postreros”.
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“La primera, que es la que está en las inmediaciones de las sierras (conocida con el nombre de Pinares) que dividen este Obispado del Arzobispado de Burgos, y está comprehendida en parte de los Arciprestazgos de Coruña, Osma, Cabrejas y Rabanera, son muy pocos los lugares en que se siembra, con motivo de ser tierra montuosa por lo general, estar poblada de pinos, tener destinada lo principal de la tierra para los prados de dallo, y estar empleados los hombres mucha parte del año en el tráfico de las carretas (es la parte principal de la Cabaña Real, y se emplea en conducir carbón, sal, madera, ect.) Estos pudieran muy bien aplicarse al cultivo de la hacienda, aprovechando para la labor la dilatada y buena tierra que tienen sin disfrutar, y hacer quantiosas sementeras, supuesto que están desocupados todo el otoño y el invierno; pero lo emplean únicamente, como me lo ha enseñado la experiencia, en divertirse en las cocinas, y en gastar lo que han grangeado el verano,.. ....se divierten con freqüencia al juego del dardo, haciendo algunas apuestas a que mejor lo arroja, y acierta á la carne, gallo u otra cosa, que fixan en un palo bastante alto, asegurando en la rueda de una carreta.) dexando al cuidado de las mugeres la labranza de las pocas tierras que cultivan, hacer algunas cortas de pinos, y guardar los atajillos de ganado, ocupando el tiempo que les queda en echar sayales ó xergas para vestirse, pero imposibilitadas enteramente á disponer otras telas precisas, y acomodadas al país, con lo que lograrían mas comodidad, poder asistir á la buena educación y crianza de sus hijos, y surtir sus casas de lo necesario para la decencia. (no gastan sábanas en la cama, y muchas personas ni aun camisa: echan muy pocas telas: apenas saben coser, ni hacer media: echan algunos paños con las lanas del país, y las hilan, en lugar de huso, con canto y un palo, que le atraviesan, dando á sus extremos para que tuerza; y es país que necesita de mucha educación.)"
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